Por: Berenice Cano y Velia Duarte

El sindicato ferrocarrilero se formó en 1933 con el fin de reagrupar a todos los trabajadores del riel, fue el primer sindicato nacional de industria de América Latina. Fue un ejemplo para todos los trabajadores del mundo por su amor a su trabajo y a su patria.

El siete de noviembre era un día emblemático para todos los trabajadores ferrocarrileros, ya que se les festejaba; se escogió esa fecha, para recordar un hecho heroico que tuvo lugar en Nacozari, Sonora; donde un maquinista prefirió sacrificar su vida y salvar a un pequeño pueblo de una explosión, ya que el tren que manejaba tuvo una avería al transportar una gran cantidad de explosivos. 

El ex presidente Zedillo, uno de los tantos traidores que sirvió siempre a intereses extranjeros, en lugar que a su patria, de un plumazo desmanteló una de las  mejores vías de comunicación: los ferrocarriles, quizá algunos de los ex  trabajadores recuerden que fue un gremio de los más responsables, que amaban su trabajo, que fueron compañeros unidos, siempre dispuestos de día y de noche a trasladarse a cualquier parte del país, por muy lejano que estuviera, para sacar a flote alguna avería de alguna máquina y no dejar que los viajeros sufrieran.

Creemos que ningún gremio fue tan solidario, tanto entre ellos como compañeros, como con la sociedad; siempre dispuestos ayudar en alguna contingencia. En los talleres o como se conocía “La Casa Redonda” se les veía llegar contentos a su trabajo con su pañuelo rojo en el cuello y sus overoles de mezclilla azul.

Fueron también de los más politizados, los que se dieron cuenta de la gran corrupción y del entreguismo hacia los Estados Unidos de algunos presidentes mexicanos; sus protestas ante esos hechos, les costó una gran represión y el encarcelamiento de algunos trabajadores.

Este artículo es como un pequeño y humilde homenaje a todos aquellos hombres que con su trabajo y dedicación hicieron que muchos de nosotros tuvieran inolvidables viajes en tren. Y en especial, es para recordar a un gran ferrocarrilero que amó su trabajo y fue luchador social, Manuel Duarte Téllez abuelo y padre de las que esto escriben.  

 

Por Génesis

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