Por Ninfa Sánchez
El G-15 en el Congreso local fracasó en su intento de ratificar las reformas que previamente habían aprobado con la finalidad de darle “más poder” al Fiscal Genera del Estado, Uriel Carmona Gándara.
La noche de este martes, el presidente del Congreso local, Francisco Sánchez Zavala presentó ante el pleno legislativo el dictamen con las observaciones realizadas por el Poder Ejecutivo, y para dejar “a salvo” las modificaciones, requería de 14 votos y solo logró sumar 13.
La causante del fracaso del G-15 fue la diputada indígena de Morena, Macrina Vallejo Bello, quien al momento de la votación, sólo “desapareció” del salón de plenos.
Incluso, el diputado Sánchez Zavala hizo tiempo para esperar a su homólogo integrante del G-15 antes de dar a conocer la votación, pero la legisladora de RSP, Erika Hernández, presionó para que se procediera a “cantar la votación” con los diputados presentes.
Sin más remedio y visiblemente molesto, el presidente del Congreso tuvo que desechar el dictamen, “en virtud de la votación”.
El dictamen planteaba dotar de más poder al Fiscal General del Estado, Uriel Carmona Gándara, a partir de la creación de las nuevas Fiscalías especializadas: en Delitos Ambientales y en la Investigación de Delitos de Tortura; así como la creación de diversas Fiscalías y Unidades Especializadas (sic).
De no haber faltado a la sesión, el diputado de MC, Julio César Solís pudo haber «salvado» la reforma ante la decisión de la diputada Macrina Vallejo de darle la espalda a sus compañeros del G-15, integrado por el PAN, PRI, PT, MC, Morelos Progresa, Nueva Alianza, así como por sus homólogos morenistas Paola Cruz, Alberto Sánchez y Alejandro Martínez Bermúdez.
Como se sabe, el G-15 se ha mantenido como un fiel aliado del Fiscal General, Uriel Carmona, a quien defendieron tras su detención y posterior reclusión primero en el Reclusorio Sur y después en el penal del Altiplano, acusado de haber obstruido la investigación del feminicidio de la joven Ariadna Fernanda.