Birán

Por Manuel Martínez Garrigós 

 

“…La época de Facebook y Photoshop hace del <<rostro humano>> una faz que se disuelve por entero en su valor de exposición. La faz (face) es el rostro expuesto sin <<aura de la mirada>>. Es la forma de mercancía del <<rostro humano>>. La faz como superficie es más transparente que aquel rostro o cara que, para Emmanuel Lévinas, constituye un lugar señalado en el que irrumpe la trascendencia del otro. La transparencia es una figura contrapuesta a la trascendencia. La faz habita la inmanencia de lo igual.”. (Byung-Chul Han. La sociedad de la transparencia, p. 27).

Exactamente en noviembre de hace dos años fui objeto de un cobarde ataque a través de las redes sociales, lo mismo en Facebook, que WhatsApp, se difundió un penoso y deleznable video donde se apreciaron una sarta de mentiras que no hacen, ni mucho menos tienen sentido alguno, en esa ocasión lo más turbio de todo es que “el títere” que penosamente maneja “la titiritera” quien por cierto me mandó a ultimar, dio la cara, frente a ese ilícito flagrante y constante en próximos días presentaré una demanda de daño moral ante el Poder Judicial del Estado de Morelos, con todo lo que significa por la desbordada corrupción de la institución.

Pero en los últimos días, otros insulsos videos por decir lo menos, una vez más y en el mes de noviembre de 2021, gran coincidencia, están apareciendo en las mismas redes sociales, el primero de muy pocos por cierto en informarme de ellos fue el abogado José Garrigós quien a propósito del flagelo ya presentó por la vía electrónica denuncia por delitos cibernéticos, ante el Ministerio Público de la Federación y la Policía Cibernética, de la Comisión Nacional de Seguridad, dependiente al día de hoy de la Guardia Nacional que creó el Presidente López Obrador; yo en los próximos días haré lo propio y ambos lo haremos ante: “La Unidad Cibernética de la Comisión Estatal de Seguridad Pública (CES) Morelos.”.

Es increíble lo que puede hacer alguien que jamás tuvo nada y que para tenerlo tiene que hacer enormes sacrificios de todo tipo, debe de ser muy complicado estar frente a un escenario así, pero bueno, ni hablar, no hay más. Pero para un catedrático de la Facultad de Derecho, de la UNAM, como un servidor y frente a tales desatinos lo que queda es recomendar el clásico de la Filosofía del gran jurista austriaco Hans Kelsen, ¿Qué es la justicia? Y recordar lo que el pensador romano Ulpiano inmortalizó: “<<La justicia es la constante y perpetua voluntad de dar (conceder) a cada uno su derecho>>.”

 

  • El autor del Artículo de Opinión es abogado litigante y actualmente catedrático de la UNAM.

Por Génesis

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