ASI LAS COSAS
Por el Lic. J. Antonio Tallabs Ortega
Con suma extrañeza y preocupación se recibió la noticia de la detención en los Ángeles, California USA, del General Cienfuegos, por órdenes de la DEA.
El hecho no es algo simple ya que se trata de la aprehensión de uno más altos funcionarios del Gobierno de Peña Nieto y responsable de la fuerzas armadas de nuestro país y por ende de nuestra Seguridad Nacional.
No tiene mucho que Trump entre sus andadas de campaña, volvió a advertir al Gobierno Mexicano que intensificaran sus acciones contra el narcotráfico e inclusive llego a citar que esta actividad ilícita seria equiparable al terrorismo y de acuerdo a sus reglas se podían ver amenazados y podrían intervenir en el país (aunque de hecho ya tienen una presencia importante bajo el agua) ; algo que se nos antoja no pudiera estar muy lejano, mas hoy en día con las políticas y acciones del llamado “Gobierno de México” que busca implantar un sistema socialista disfrazado de transformación, que para nada le es conveniente a los intereses de los EEUU.
No debemos minimizar el hecho de la detención, es algo muy delicado y debe preocuparnos y ocuparnos a todos.
Esta Cañón, porque nunca se había dado un episodio de esta magnitud y temática en nuestra común historia y pone en entredicho a nuestras fuerzas armadas en general, causando al ejército mexicano descredito internacional y desconfianza nacional.
Ciertas o no las presuntas acusaciones al General Cienfuegos, con la cobertura y el señalamiento que se hizo en los medios de comunicación, se ha hecho un linchamiento de su persona, soslayándose la presunción de inocencia en su favor y ha sido exhibido a diestra y siniestra cual vil delincuente y sin que al momento se le tenga acreditadas la imputaciones que orillaron la detención.
El descredito del ejército y sus consecuencias se ha puesto de manifiesto con las expresadas acciones anunciadas por el Presidente López, de que se revisara y se hará una “limpia” de los mandos actuales de la fuerzas armadas, de los que pudieran tener relación con el otrora Generalísimo; pero esto esta cañón, porque el actual Mando de Cuatro Estrellas, fue cercano colaborador en la dirección operativa de la Secretaria de la Defensa Nacional y varios de los mandos hoy al frente están en la misma circunstancia, lo que parece ser lógico, ya que el ejército es una Institución de Hombres y Mujeres de Armas que conviven en un solo entorno, ahí no hay partidos ni elecciones que permitieran el arribo al mando de opositores, son un todo, se mueven y se acomodan las piezas por decisión del Presidente que es el Supremo Comandante, lo que pone en un brete al Presidente, ya que él mismo es parte del ente y es responsable de sus propias designaciones en la cadena de mando.
El asunto, está cañón, porque aun cuando se pretenda derivar la responsabilidad a la administración anterior o hacer “leña política” del tema, el problema es de fondo, ya que se “acusa” al mando superior y en una lógica vertical, de ser ciertos estos señalamientos, en la cadena de mando hay más responsables y esto, como dijimos, no solo debería preocupar al expresidente Peña, sino debería ocupar y preocupar al propio Presidente López ya que si la cabeza de aquel tiempo fallo los pies y demás miembros del cuerpo en que condición se encontraron y se encuentran?. Están en su entorno y está cañón.
Esta cañón, pues, porque los norteamericanos actuaron sin previo aviso al “amigo” de Trump, asestándole un golpe bajo fuerte muy fuerte y más en los tiempos donde la pretensión del gobierno es (o era?) involucrar al ejército en el manejo directo de la Inseguridad Pública y en muchas tareas gubernamentales.
Así las cosas y no se me antoja que el General Cienfuegos se la haya jugado como los norteamericanos dicen, me suena difícil de creer que se pusiera a hacer favores a la delincuencia organizada, así como así, por una lana, como lo aseguran; dinero el General lo podría haber hecho de muchos modos y no de manera tan simplista como lo aseguran, de que acepto sobornos de un cartel no tan importante; más evidente se hace esta apreciación, al saber ahora que el ejército cuenta con multimillonarios recursos en fideicomisos (que no son motivo de extinción) de los cuales pudo echar mano libremente al estar a su disposición; no justifico ni tampoco imputo; en fin esta cañón el cañonazo que recibimos como pueblo mexicano y a ver cómo sale el ejército librado esta y estaremos a la observación de los movimientos del “gobierno de México”.
Seguimos al pendiente.