MAESTROS: ¿CAERÁN EN LAS ARTIMAÑAS POLíTICAS DE ELIACÍN?
Repaso
Carlos Gallardo Sánchez
A veces indigna observar que personajes de la política rupestre en Morelos, supongan que tienen al magisterio en sus manos para conseguir alguna nominación electoral. Tal es el caso de Eliacín Salgado de la Paz, director general del IEBEM y declarado aspirante a la candidatura de Morena para la presidencia municipal de Cuernavaca. Como se sabe, es el principal impulsor del llamado Movimiento Magisterial Morenista (MMM), entendido como uno de los tentáculos de apoyo a las aspiraciones de continuismo en el poder local, lo que significa que está supeditado a los ires y decires de Ulises Bravo, influyente hermano del pésimo gobernador que es Cuauhtémoc Blanco Bravo.
Desconozco si el MMM está debidamente constituido como una especie de asociación civil y disponga de sus posibles estatutos o declaración de principios y programas operativos de acción y reflexión para saber cuáles son sus bases fundamentales con orientación de izquierda y en congruencia verdadera con la llamada Cuarta Transformación.
Lo más probable es que nada de eso tenga y hasta el momento sólo se concrete en reuniones en las que se pretenda hacer acto de presencia y demostración de una presunta fuerza social que buscaría, desde luego, espacios de representación o cargos públicos, en caso de que los advenedizos aspirantes a la gubernatura, como son Víctor Mercado y Sandra Anaya, alfiles oficialistas de los Bravo, fueran los elegidos para aparecer en las boletas electorales.
Hasta el momento, sṕlo tengo conocimiento de la concentración de docentes “simpatizantes” del MMM, como la realizada en el Teatro de la Ciudad, en donde por cierto Ulises Bravo se refirió, sin nombrarlo, al Partido Nueva Alianza, al afirmar que el magisterio no es propiedad de un partido. Otra reunión organizada en días pasados, fue una especie de desayuno en el que se convocó a supervisores y jefes de enseñanza, entre otros directivos, quienes son los más directos vínculos, por las funciones que tienen encomendadas,con el personal que labora en los diversos centros escolares. Quizá Eliacín Salgado suponga que, como antaño, esos “mandos” educativos puedan influir para que “sus” maestras o maestros se adhieran al esperpento que para este opinador es el MMM.
Frente a esa intentona de proyectar la solidez e imaginaria representatividad del Movimiento Magisterial Morenista, en otros ámbitos y con distintos personajes hay manifestaciones de simpatía hacia determinados políticos, como sucedió también hace algunos días con la reunión que Rabindranath tuvo con profesoras y profesores que le son afines para su proyecto de contender por la gubernatura del estado.
Por lo anterior, me queda claro que, con los recursos de “convencimiento” que tiene Eliacín Salgado de la Paz, dada la responsabilidad pública que tiene y, para no quedar mal con quien ahí lo puso, seguirá intentando demostrar que cuenta con la capacidad de convocatoria entre esa población de miles de profesionales y empleados de la educación básica, para merecer la postulación a la que aspira, pero no podrá evitar que los docentes morelenses ejerzan su propio arbitrio para inclinar sus preferencias electorales sin la tutela de nadie, así sea el principal interesado un encumbrado funcionario que está jugando para su santo.
Las alternativas por las que pueden optar son varias y no sólo el MMM y sus principales alfiles o para Rabindranath Salazar Solorio. Hay otros que en los hechos han demostrado su solidaridad con el magisterio. Allí están los diputados locales de distintos partidos que han conseguido la definición de una partida presupuestal para el pago de primas de antigüedad a los pensionados y jubilados. En este bloque se advierten simpatías para el legislador aliancista Agustín Alonso, quien además ha ofrecido otro tipo de apoyos en diversos eventos, como el festejo, por primera vez, a los maestros jubilados. Ahí está también el presidente municipal de Jiutepec, Rafael Reyes, quien, sin aspavientos demagógicos, ha tendido la mano cuando la dirigencia seccional del SNTE que encabeza Joel Sánchez Vélez, le ha solicitado algún apoyo. Y hay más, por lo cual, insisto, el magisterio morelense difícilmente se dejará mangonear con iniciativas coyunturales como las que alimentan al MMM.
De refilón
Sin temor a equivocarme, Cuauhtémoc Blanco Bravo ha sido un gobernador distanciado del magisterio estatal. A nadie convence de su apego a este sector profesional cuando asiste a algún acto institucional. A lo que me refiero es su desvinculación afectiva y emocional, durante su mandato, con los trabajadores de la educación en la entidad. Por citar un caso, puedo afirmar que para los festejos que cada año se hacen del Día del Maestro, el gobierno estatal ha sido reacio a colaborar. No fuera cualquier evento balompédico, porque allí sí haría acto de presencia. Es su querencia. Ni modo. ¿Habrá docentes que ignoren que el Movimiento Magisterial Morenista surge al amparo del primer mandatario y su carnal Ulises Bravo?
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