EL ORGULLO DE MORELOS

Por Chema Gálvez

En el año mil novecientos cincuenta y cuatro un pequeño niño robó la limosna de una pequeña iglesia en Cuernavaca, fue arrestado y el responsable de la parroquia, el padre William Wasson, desistió de presentar cargos y seguir el proceso por robo contra el pequeño, le impresionó el hecho en el que el móvil era el hambre que padecía y las condiciones generales en las que vivía, el juez entonces le cedió la custodia del niño. Posteriormente el juez le empezó a enviar al padre a más niños que al igual que el primero eran infractores menores, es así como comienza la labor maravillosa del padre que hasta el día de hoy sigue rindiendo frutos fundando NUESTROS PEQUEÑOS HERMANOS que con el tiempo se expandió gracias a la colaboración de la sociedad civil morelense y de otras partes del mundo. El objetivo era muy simple, romper con la cadena de pobreza.

Este ejemplo es el vivo retrato de cuando se unen voluntades y en el que se deja el ego totalmente fuera, aquí el protagonista es el servicio, el que los internos puedan desarrollar todo el potencial que tienen para poder servir a su comunidad, si bien la visión plasmada en este texto pudiera parecer poco atractiva, trabajar realmente en esa dirección daría resultados positivos sorprendentes. En NUESTROS PEQUEÑOS HERMANOS se trabaja creando un ambiente familiar, se privilegia este concepto como base de la sociedad y se cobija responsablemente a los niños, niñas y adolescentes en condiciones de vulnerabilidad extrema.

Quizá suene exagerado, pero yo veo un México en peligro, en el que la familia tiene que ser el principal proveedor de los valores fundamentales que ya no son tan visibles en la sociedad actual. Tenemos mucho, somos una nación privilegiada en muchos sentidos y no podemos olvidar que los que tenemos la oportunidad de poder colaborar con estas redes de ayuda tenemos una responsabilidad muy directa en la sociedad. Morelos es tierra de hombres y mujeres valientes que tradicionalmente y ancestralmente han luchado por la equidad e igualdad de oportunidades, tierra de revolucionarios y visionarios que buscan tan solo una luz de libertad. Así como ellos busquemos cómo devolver algo a las comunidades que nos han marcado, llenado de orgullo y de historia, de esencia bravía y de identidad démosles el honor y gratitud a los colaboradores de esta noble empresa y demos la mano hoy que nos toca al orgullo de Morelos a…NUESTROS PEQUEÑOS HERMANOS.

 

  • El autor del Artículo de Opinión es Conferencista y Consultor.

Por Génesis

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