Por Miguel Ángel Alarcón Urban 

Han pasado ya 39 años desde que Morelos vivió los mejores años con el mejor gobernador de todos los tiempos.

Graduado en la Escuela Nacional de Medicina en 1935, en la especialidad de Ginecología y Obstetricia, su tarea médica pronto le dio una fama bien merecida.

Pese a ello.  El destino le tenía otros caminos, y nadie puede cambiar sus inescrutables designios. Lauro Ortega Martínez,  fue un hombre con carisma y personalidad.

Desde Jefe de Departamento de Psicología e higiene escolar,  Oficial Mayor de Salubridad, inicio su carrera política como ayudante del Tesorero del Distrito Federal, fue subdirector y director de la Comisión México-Norteamericana contra la Fiebre Aftosa, Subsecretario de Agricultura, Secretario General de la CNOP, Tesorero del DF, Secretario general del Comité Ejecutivo Nacional del PRI hasta llegar a presidente del CEN del PRI.

Fue Diputado Federal en dos ocasiones, y finalmente llega a gobernar Morelos de 1982 a 1988, desde esa fecha Morelos vive una transformación vertiginosa, y llegan así los tiempos en que se puede vivir en paz y con dinero en los bolsillos, desde los taxistas, hasta el panadero y el campesino, sin olvidarse de las mujeres que hacen de sus hogares verdaderos talleres artesanales.

Los campesinos,  ven florecer los estanques acuícolas, las mujeres aprenden a cultivar flores que son exportadas al extranjero, en suma, Lauro Ortega logra innovar con fertilizantes el campo morelense, genera la llamada industria de las flores, puso en marcha tierras ociosas,  doto a muchas personas de granjas familiares, genero la confección de prendas de vestir,  asi como la cría de tilapia y langostino.

Lamentablemente al llegar a su término su sexenio, el equipo gubernamental de quien le sucedió, tuvieron más interés y prisa en enriquecerse y en solo seis años alcanzaron el record de corrupción inimaginable.

Lauro Ortega tuvo por encima de otros, el mérito de saber rectificar, tuvo la intuición excepcional, y sobretodo generó una metamorfosis  política pese a la fragilidad existente, hoy a casi 40 años de su mandato, la visión del viejo político sigue vigente para gobernar y trabajar  con transparencia, justicia y honradez.

Mi remembranza, es un homenaje al mejor gobernador de Morelos de todos los tiempos.

 

  • El Autor del Artículo de Opinión es actualmente Coordinador de la Memoria Histórica del municipio de Yautepec.

Por Génesis

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *