ASÍ LAS COSAS
Por el Lic. J. Antonio Tallabs Ortega
Cuando queremos decir que algo es de baja calidad, que no reúne los estándares de calidad que se necesitan, que no se realizan las cosas como deben ser, que se hacen las cosas a modo y no conforme las normas aplicables estipulan, decimos, que esa actividad es “bananera”.
Quizá esta expresión muy tabasqueña se refiera a que como las plantas de banana abundan en frutos y son muy prodigas, no se les considera importantes o son muy comunes y consecuentemente baratos, pero en términos prácticos el calificativo de “bananero”, como acción, se refiere a lo bajo, a lo menos, a lo barato, a lo caprichoso y voluntarioso.
Pues bien, como que las cosas en el país, desde el inicio de este gobierno, ya no vislumbran esperanza, a pesar de que el lema político bajo el cual se llevó a cabo la campaña fue precisamente el de que el partido Morena era “la esperanza de México” y lo siguen ofertando en esta campaña; pero ya no hay ilusión en el ciudadano de progresar, se le aprecia con desgano y vago en sus anhelos y esto no es más que el resultado de los síntomas de la pandemia, en parte, pero la mayor parte se derivan de la falta de expectativas que se gestan ante un panorama desolador lleno de desesperanzas y de lamentaciones, por las decepciones sufridas durante dos años y medio de un gobierno fallido, voluntarioso y caprichoso, que no cumplió y que rompió el pacto surgido de la confianza de crear esperanza y expectativas para satisfacer la ilusión de algo mejor. Cuando no se cumple con lo ofrecido no hay justicia verdadera sino “justicia bananera”.
Como que lejos de hacer las cosas, en el gobierno, se la pasan con el “dejar hacer-dejar pasar”, como táctica o estrategia quizá, pero les ha resultado negativa, ya que en el tema de la inseguridad estamos cada día peor, se registran los más altos índices de homicidios dolosos, que según el cantar de siempre, es producto de los “acomodos de los carteles”, lo que no se nos antoja ya creíble y existe un absoluto ambiente de impunidad al respecto, es decir, no hay homicidas atrapados o responsables de estas muertes de mexicanos que esten detenidos por su delito y los que “llegan a caer”, son por circunstancias distintas; está claro, no hay justicia efectiva en este tema y sobre el mismo, se anunció que febrero del 2021 fue el mes con más baja cifra de homicidios dolosos de lo que va del sexenio, “cayeron los homicidios dolosos” adujeron los medios, pero nunca nos dijeron que ese mes solo contabilizaron 21 días, les falto una semana de contar, lo que se puede observar en el “minisitio” http://www.informeseguridad.cns.gob.mx/ (Morelos con 6 homicidios dolosos a la par de Jalisco el día 21 de marzo del 2021), no obstante que es su informe presumen que “La actual administración reafirma su compromiso con la verdad, erradica el sesgo, la mentira y la manipulación de cifras en materia de seguridad pública”. Y además hay otros flagelos que atentan contra nuestra seguridad personal y familiar y nuestro patrimonio, como el robo de autos, robos en el autotransporte, robos a casa habitación y nada de resultados efectivos; Justicia ineficiente es “justicia bananera”.
“Este gobierno no participará en una dinámica de simulación u ocultamiento de datos de información criminal.
Existe un esfuerzo histórico para impulsar medidas que permitan atender el fenómeno de la violencia con una visión de largo plazo tales como la Guardia Nacional, Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, el Programa Jóvenes Construyendo el Futuro, entre otros.”, presumen en sus informes diarios en el sitio señalado, pero a qué tan largo plazo? , es la pregunta, ya que estamos por cumplir dos años y medio de este gobierno y acaso la Guardia Nacional ha funcionado?, solo vemos persecución de actores políticos con fines electorales y en que nos ha beneficiado que se den dadivas a los jóvenes?.
Este problema nacional, de la inseguridad y el otro gran problema nacional de salud, la pandemia y la vacunación correspondiente, están siendo minimizados por el Presidente, ya no son tema central de sus mañaneras, se “enfermo o enfermaron a López Gatelle” y encontró lo que esperaba, que se impugnara la reforma a la Ley Federal de Electricidad y que un Juez se atrevió a desafiarlo, para tener tema político, polemizándolo y así eludir tratar la problemática nacional; astuto, pero omiso y demoledor, el presidente, arremete tan solo contra el Juez Gómez Fierro, su chivo expiatorio, siendo que hay otros jueces que a la par están concediendo suspensiones a la aplicación de sus reformas preferentes; sin embargo lo grave del tema es que esta denigrando a la justicia mexicana y erosionando sus estructuras legales, sus leyes, circunstancias que demeritan la confianza del pueblo es esa Institución y busca imponer su voluntad más allá del pacto de las fuerzas políticas, de funcionar bajo un régimen republicano que se sostiene bajo el equilibrio de tres poderes o fuerzas sociales que confluyen y que su desproporción provocaría el caos social, la anarquía o será que en parte sea esto su propósito?; muchas veces el propio presidente cuando actuó en otras responsabilidades oficiales, cuando lo iban a desaforar dirigiendo el gobierno de la Ciudad de México, recurrió a la Justicia Federal y se le amparo, fue beneficiado con las suspensiones de los actos, no en una ocasión sino en varias, tal y como hoy actuó el Juez Gómez Fierro, pero ahora para él es distinto y “la Justicia no puede ser y los jueces no pueden actuar en favor de las empresas trasnacionales”, se escuchaba y se percibía de las posturas oficiales asumidas, pero lo que en el fondo se busca, ya se dijo, es distraernos de los grandes problemas nacionales y para que la justicia sea a modo y tengan su “Justicia Bananera”, puesta al servicio del presidente tabasqueño.
Así las cosas, la Justicia nunca debe estar al servicio de los intereses políticos, la autonomía e independencia de los Juzgadores debe ser un pilar para sostener la confianza del pueblo en las Instituciones, el diluir la fortaleza del Poder Judicial, se hace con el único objeto de controlar sus decisiones jurisdiccionales y es algo que no debemos permitir, menos para los que nos formamos en las leyes y gozamos de las bendiciones del derecho; si no hay Justica se orilla al pueblo a la anarquía, al desorden, se le incita a la violencia y a la barbarie. “Justica denegada, Justicia bananera”.
Según encuestas del 2017, un alto porcentaje del electorado mexicano (80%), buscaba un cambio y de esos mexicanos la mayor parte (60%), deseaba un cambio radical de las cosas, pero un cambio para mejorar no para empeorar, donde haya Justicia verdadera, no “Justicia bananera”.
Retomemos el país, para que no se nos vaya entre las manos.
Seguimos pendientes.
#Morelos
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